La Real Sociedad saboreaba su séptima victoria en sus últimos ocho partidos, tras voltear además la ventaja inicial del Rayo Vallecano, cuando en la prolongación apareció Bebé por segunda jornada consecutiva para marcar y en esta ocasión recuperar un punto, que sigue alargando la buena trayectoria de los de Francisco en cuanto a resultados se refiere, sobre todo.
El partido comenzó muy parejo, con mucha pelea por hacerse con el control de la pelota y sin un dominador claro, ni tampoco oportunidades para marcar, hasta que Lejeune cometió una falta clara sobre Kubo justo en la frontal del área y, tras toque en corto de Oyarzabal, Brais Méndez dio una muestra más de su extraordinario momento de forma estrellando el balón en el larguero.
El Rayo intentó reaccionar, pero la Real se defendía bien e incluso asustó de nuevo, con un disparo de Barrenetxea que golpeó en un defensor cuando iba camino a portería, y una acción individual de Kubo en la que Mumin reaccionó a tiempo cuando el japonés ya parecía que se le iba en dirección a la portería de Dimitrievski.
Fue cerca de la media hora de juego cuando, entonces sí, los de Francisco cambiaron el partido y, tras un remate cercano de Álvaro que rechazó Remiro y un disparo de Raúl de Tomás que se fue arriba, Mumin adelantó a los locales al fusilar al portero txuriurdin, que había rechazado un potentísimo disparo de Lejeune.
La Real no acusó el golpe y rozó el empate de inmediato, con un remate de Kubo que se estrelló en la cruceta y otro más cercano de Pacheco, en un córner, que despejó con un paradón Dimitrievski, que luego nada pudo hacer cuando Oyarzabal remató en boca de gol un gran centro de Barrenetxea. El empate era más justo al descanso.
El 7 txuriurdin estuvo muy cerca de marcar nada más volver de los vestuarios, pero su potente derechazo lejano se le fue rozando el poste izquierdo de la portería vallecana, con Raúl de Tomás cabeceando luego arriba y Kubo estrellando una falta en la barrera, ya que de nuevo hubo momento de alternativas.
La Real consiguió voltear el resultado con otro tanto tanto de Oyarzabal, este de penalti tras mano del Pacha Espino, e incluso tuvo luego dos opciones para sentenciar, pero los disparos de Kubo, primero, y el recién incorporado Sadiq se fueron desviados por muy poco.
El equipo de Imanol terminaría pagando no acertar en esas dos ocasiones y el no saber tampoco parar el partido, perder tiempo y aguantar el 1-2, ya que en el último minuto, en el ida y vuelta, Bebé disparó desde la frontal y puso el 2-2. Todavía hubo tiempo para que Sadiq tuviera el triunfo en la última jugada, pero su testarazo no encontró portería.