El Athletic acaba de renovar esta semana a Unai Gómez, futbolista al que podía prorrogar contrato por una temporada de manera unilateral pero ambas partes han decidido negociar y extender la relación hasta 2028, y el club continúa con varios frentes abiertos. El más mediático de todos es el de Nico Williams, que acaba en junio de 2024 y ha rechazado el interés de otros clubes por seguir en la entidad.
MARCA destacó en su edición papel del pasado jueves que en el club hay confianza y optimismo en que el trato se lleve adelante en las próximas fechas, quizá incluso antes de que se celebre la Asamblea General de Socios Compromisarios del 31 de octubre. El presidente Jon Uriarte ha insistido en esa idea en declaraciones a DAZN antes del partido que mide al Athletic con el Barcelona: "La renovación de Nico? Siempre queremos transmitir tranquilidad. Queremos hacer un proyecto atractivo para todos los jugadores. Confiamos en que él encuentre el proyecto atractivo y podamos contar con él para muchos años más. Nosotros pensamos que así va a ser".
Athletic y futbolista llevan tiempo tratando las condiciones de una posible renovación que en el club consideran cercana. No obstante, el optimismo del presidente ya ha chocado otras veces con la realidad. Nada más cerrarse el mercado de verano Uriarte, al referirse a cómo había estado de cerca Laporte del Athletic, relató en una rueda de prensa que "si el Al Nassr no hubiese aparecido el jugador estaría ahora con nosotros". Sin embargo, semanas después, en una entrevista con El Correo, el futbolista comentó que "no llegamos a tener ninguna propuesta formal, a mí todavía me quedaban dos años de contrato (en el City) y no iba a ser fácil negociar con ellos. Y creo que sinceramente no sé si hubieran podido igualar lo que el Al Nassr pagó por mí". El central internacional salió rumbo a Arabia con un traspaso de 30 millones de euros y un sueldo anual próximo a los 25 millones de euros por campaña
