Alarma en el sector de la moto: esta es la fecha en la que Cataluña podría prohibir las de gasolina

Terremoto en el sector español de las motos. Salvador Illa, Presidente de la 'Generalitat' de Cataluña, ha presentado su 'Plan de Impulso al Vehículo Eléctrico 2025-2030' y el texto parece condenar a la chatarra a las motos de combustión, de las que en Cataluña hay más o menos 1.180.000 unidades.

Illa quiere "liderar"

El plan que ha presentado Illa se basa en cinco ejes de actuación. Algunos de ellos tan importantes como la creación de unos 9.000 nuevos puntos de recarga o una estrategia para mejorar la percepción social de los vehículos '0 emisiones'. Todo porque "Cataluña quiere liderar a favor de todos, del conjunto de España y de Europa", según ha dicho su presidente.

Sin embargo el punto dos del segundo eje ha levantado muchas ampollas al recoger la "promoción de la limitación paulatina de la motocicleta de combustión. Paralelamente a la implementación de restricciones graduales de circulación de motocicletas de combustión con etiquetas ambientales B y C, se establecerá un programa de transición industrial para promover la producción, distribución y reparación de motocicletas eléctricas".

Es decir, que desde este mismo año, y de forma paulatina hasta 2030, se iría limitando su uso a las motos de gasolina o poniendo otro tipo de trabas a estos vehículos, como podrían ser unos mayores impuestos.

Menos emisiones que un coche 'Eco'

Hay que tener en cuenta que las motocicletas con distintivo ambiental 'Eco' (como las Kawasaki Hybrid) son algo anecdótico, por lo que lo normal es que cualquier moto de gasolina las que ahora están en el concesionario merezca el distintivo C. Y estas mismas motos cumplen con la normativa de emisiones Euro5+, lo que hace que emitan menos partículas nocivas que un coche con etiqueta 'Eco' de la DGT.

Además, hay circunstancias que desde la Generalitat parecen no haber tenido en cuenta. Una de ellas es que muchos s de motos podrían verse obligados a renunciar una moto que tal vez todavía estén pagando, y que en cualquier caso aún puede estar nueva. Otra es el hecho de que cada día, y solo en Barcelona, se producen 450.000 desplazamientos diarios con origen o destino al área metropolitana. Estos desplazamientos aumentarían de forma considerable si los motoristas no pudieran comprarse otra moto y se vieran obligados a dejar la moto en el garaje y coger en su lugar el coche (quien lo tenga y no quiera usar el transporte público).

Por todo ello, y por la demonización que el gobierno catalán muestra con ello hacia la moto, desde Anesdor (la patronal del sector) José María Riaño (su secretario general) ha dicho que este planteamiento es "inaceptable. La moto de combustión no es el enemigo de la movilidad sostenible, sino parte de la solución junto a la moto eléctrica, y el Gobierno de la Generalitat debería explicar a estos s por qué quiere restringir el uso de sus motos, pero no plantea hacer lo mismo con los coches".