Hasta cuatro penaltis señaló Quintero González a favor del Mallorca. Finalmente solo se lanzaron tres, porque uno fue anulado tras la revisión del árbitro en el monitor del VAR. Pero igualmente, la polémica fue la protagonista del encuentro. "Si digo lo que pienso, igual no entreno más", declaró el técnico del Espanyol, Manolo González
Minuto 90'. Empate en el marcador. Y Abdón Prats se dispuso a lanzar desde los once metros. Paró Joan García y volvió a salvar el gol tras el disparo de Valjent en el rechace. Pero el VAR avisó al colegiado para que revisase "una acción bastante compleja" y este acabó anulando el lanzamiento. A la tercera va la vencida, Muriqi acabaría anotando la repetición de la pena máxima.
El VAR (ocupado por del Cerro Grande) avisó de que los jugadores del Espanyol, Kumbulla y Cheddira, habían invadido la semiluna del área antes de que se ejecutase el penalti. La decisión de repetir el lanzamiento viene de la intervención del propio Cheddira. El marroquí toca el balón tras la doble parada de su guardameta y, tras el toque, Joan García acaba atrapando el balón, finalizando la acción de peligro. Quintero González decidió repetir el penalti, que anotó Muriqi para sumar el 2-1 en el minuto 98' (ocho minutos después del lanzamiento de Abdón Prats).
Igualmente, tanto el club como la afición perica se sienten indignados con la decisión arbitral. "Creo que las cosas son mucho más sencillas, y se lo he dicho al árbitro. No se puede dificultar lo que es el juego, revisarlo cinco minutos después. Ya está bien, ya bajó el Espanyol en su día, nos tendrán que respetar. Somos un club con historia, ejemplar, con masa social… ¿Esto se le haría a otros?", confesó un enfadado Manolo González.
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