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Sí, pero. Así eran todas las respuestas de Marc Márquez cuando se ensalzaban sus impresionantes remontadas de Barcelona en MotoGP, como pasara lo propio con las de Le Mans. No en vano, en total, en cuatro carreras, recuperó nada menos que 45 posiciones de las parrillas a las metas.
El ilerdense está satisfecho por sus salidas -unas más mágicas que otras, pero todas buenas- su paciencia, su determinación para adelantar y su ritmo. Sin embargo, el de Cervera es el primero que avisa que así no puede seguir si quiere aspirar, con más rotundidad, a la corona. "No quiero repetir, en alguna cometeré un error. Si quiero luchar por el Mundial, debes empezar en las dos primeras líneas, ellos (Martín y Bagnaia) tienen algo más", advierte.
En realidad, el de Cervera tiene claro por qué está condenado a estas remontadas: "Hay que empezar mejor los viernes". Y sabe las causas. Está penalizado porque no tiene información propia con la Ducati en cada circuito, a diferencia de Jorge y Pecco. Su propio jefe técnico en Gresini, Frankie Carchedi, lo expone. "Os aseguro que no empezamos atrás a propósito. Los viernes sin datos previos de Marc son duros", confesaba.
Digamos que el octocampeón va tarde y se debe centrar en el ritmo, cosa que, más o menos acaba consiguiendo y lo muestra en carrera, pero para apretar a una vuelta hay que ser más exactos, medir más cada curva porque los detalles, cada décima es oro... o una condena. Y él debe reprimir instintos del pasado, del estilo de HRC.
Sin rubor
Por eso Marc no oculta que estudia a fondo lo hecho por Bagnaia y Martín en las sesiones y así crece. En Montmeló, al ser preguntado cómo lo hizo para cuidar las gomas y subir fue claro: "Mirando los datos de Pecco del sábado. Cuando tienes un piloto rápido, lo copias. Es así. Yo estoy acostumbrado a pilotar con la Honda durante diez años. Vi su estilo e intenté copiar lo mejor de Jorge y Pecco. En cada circuito aprendo algo porque ellos son perfectos, tras cinco años con esta moto", reconoció.
Bagnaia y Martín también le copian
Pero, estas miradas nada furtivas tienen una doble dirección. El campeón y el subcampeón de 2023 igualmente analizan lo hecho por el mayor de los Márquez. Y destacan su entrada en curva. "En Jerez miré muchas curvas a izquierdas de él para entenderlas. No puedo hacer exactamente su estilo, ni el de Jorge, que levanta mejor la moto y está más en el ápice que yo, intento copiar cosas de él", itía Bagnaia.
Martinator tampoco lo oculta. "El piloto perfecto no existe. Bagnaia es el mejor en la frenada y Marc, en entrada. Por una parte es mejor tener los datos, pero, por otra, es más difícil ganarlos", expone el madrileño.
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