El camino de Luis Enrique hasta la final: el regreso al éxito de un entrenador que se alejó de los campos

El fútbol es caprichoso. Capaz de ofrecer consagraciones y derrumbes en cuestión de semanas. Y si hay un equipo que encarna esta montaña rusa emocional en la temporada 2024/25, ese es el Paris Saint-Germain. Dirigido por un técnico que no entiende de derrotismo ni de pánico escénico, Luis Enrique Martínez, el PSG ha recorrido un camino lleno de turbulencias, remontadas y reafirmaciones hasta plantarse en la gran final de la Champions League, este sábado.

Lo que hoy se presenta como un relato épico, comenzó como una posible catástrofe: una fase de grupos que rozó el desastre, una prensa que pedía cabezas y una afición dividida. Pero el técnico asturiano nunca perdió la fe en su idea. Y la historia, al menos por ahora, le está dando la razón.

De la pesadilla al éxito

El sorteo de partidos no fue amable con el PSG. Tuvo duros enfrentamientos en la ‘liguilla’ previa y entró de milagro entre los equipos que iban a jugar la fase de dieciseisavos. El sorteo le deparó al PSG un duelo francés: el Brest, revelación de la Ligue 1 y sorprendente clasificado para la fase eliminatoria. No obstante, pese a la buena primera fase del Brest, los de Luis Enrique vapulearon al cuadro galo con un 10-0 global.

De esta manera llegaron al duelo estelar de los octavos de final ante el Liverpool. Los pupilos del técnico asturiano hicieron un partido magnífico en la ida en el Parque de los Príncipes. Solo les faltó el gol, que sí pudo anotar el Liverpool, en el único remate a puerta. Sin embargo, el PSG fue capaz de asaltar Anfield y forzar los penaltis. En la pena máxima, los ses no perdonaron.

El cuadro francés estaba practicando el mejor fútbol de Europa. Algo que demostró en la ida de los cuartos de final ante el Aston Villa. Los de Luis Enrique le dieron la vuelta a un tanto inicial de los villanos, demostrando valentía y personalidad. El encuentro acabó 3-1 y parecía que la eliminatoria estaba sentenciada. Pero los parisinos no evitaron el sufrimiento en la vuelta, donde el cuadro de Emery estuvo cerca de forzar la prórroga.

Ya en semis, el PSG mostró su versión más seria y efectiva, ganando 0-1 en el Emirates ante el Arsenal y 2-1 en la vuelta. De esta forma han llegado a la final contra el Inter. El verdadero artífice de la resurrección de este equipo ha sido Luis Enrique. Fiel a su filosofía, el técnico ha ido puliendo su equipo semana a semana. El PSG de hoy es una mezcla de energía joven, experiencia y disciplina táctica. Defiende mejor, sufre menos, y cuando aprieta el acelerador, es letal.